martes, 30 de abril de 2013

Whatever Nro 12 : Discos Recomendados



Discos Independientes




















Los Todopantalla - Lecciones de Vértigo

Sr. Todopantalla surge en el 2001, adoptando su actual nombre dos años después. Estas 7 canciones de su autoría son una continuación de dos EP ‘s anteriores titulados Dispositivo para despertar personas (2008) y Cuadernos de viajes para sonámbulos (2010). Edición completamente independiente que contó en su primera y limitada edición, con diferentes portadas personalizadas a cargo de diversos artistas locales. LT se mueven con soltura dentro de los estilos Indie, New Wave y electropop con un sonido pulido y cristalino. Grabado y masterizado por Emmo Hynes y mezclado por Martín Margüello, el trabajo también cuenta con varios músicos locales invitados. Herederos directos de agrupaciones santafesinas de la década del ’90 como Celestito, apuestan a seguir una línea entre las artes plásticas, el cine y la música como un concepto único y amalgamado, que se puede contemplar en su participación en un corto llamado Verano (dirigido por Milton Secchi, 2010). Para los amantes de estos sonidos, descúbranlos si aún no los conocen y abran sus oídos como pantallas en esta pequeña lección de vértigo musical! - > Por José I. Alfageme.























Nicolás y el desorden – Nicolás y el desorden
 
Hace algún tiempo, el diario La Voz del Interior publicaba una nota sobre una “nueva camada de cantautores cordobeses” alejados de lo tradicional e inmersos en la dinámica de la web y las redes sociales. El gran ausente del artículo era, sin dudas, Nicolás Sicardi, cantante y guitarrista de la banda post-hardcore Árboles en Llamas, y responsable del reciente Nicolás y el desorden, un disco en solitario que, aunque austero y concreto, muestra detalladamente el oficio cancionista del músico cordobés.
Sin embargo, por encima de la capacidad compositiva de Sicardi y de una lírica capaz de generar sensaciones encontradas, lo que se destaca es la inmediatez y la espontaneidad del registro. La interpretación de cada una de las ocho canciones publicadas en bandcamp es, efectivamente, aquello que les da vida y las convierte en algo especial. No hay agregados ni ediciones, apenas una guitarra y una voz que canta. Por eso, quizás, entre ruidos de ambiente y el sonido de un grabador que se prende y se apaga, lo que prevalece es la sensación de estar reviviendo un momento congelado en el tiempo. > Por Juan Manuel Pairone


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Discos Nuevos






















Tigercats – Isle of dogs

Esta más que claro que muchas bandas en este último tiempo han optado por apostar a los sonidos dulces y las melodías felices para transmitir su mensaje. Los Tigercats, oriundos de Londres, no son la excepción. Estos muchachos han sido comparados con bandas como The Wave Pictures y Los Campesinos, entre otras. Isle of dogs, su primer LP, exhibe un indie rock despreocupado, alegre, repleto de melodías para el recuerdo, con mucha inocencia veraniega, guitarras al frente (casi deudoras de los neoyorquinos de Television), la voz aguda de su frontman, la intervención en momentos precisos de una segunda voz femenina, y las referencias a personajes como “Kim & Thurston”, y “Stevie Nicks”. Además, el sonido rústico y lo-fi, no deja de recordar a la primera etapa de Pavement. Como se puede ver, su estilo nos remite al de muchas bandas (y por eso esta idea de que pueden parecer “del montón”), pero despojándose de ciertos prejuicios, se puede disfrutar con creces estas hermosas 11 canciones, mientras esperamos a que encuentren una identidad más propia en su próximo material. – > Por Lautaro Albarenque























King Krule –  King Krule
 
Apenas cinco canciones alcanzan para que Archy Marshall nos desoriente y nos abrume con su inigualable voz y su talento compositivo. En parte, porque el joven responsable de King Krule es, ante todo, un cantautor que, desde su particular forma de pensar y tocar la guitarra, es capaz de elaborar una lectura absolutamente personal del jazz, el dub, el hip-hop y la electrónica británica de los últimos años. Pero, además, porque todo eso sucede en sólo trece minutos de música en permanente ebullición, con matices aparentemente disímiles que conviven naturalmente en el mundo creado por Marshall y su computadora.
En ese espacio ideal, el filo de las guitarras, la tensión armónica y una rítmica cuidada se complementan para dar forma a un paisaje austero en el que la simpleza y la honestidad de las canciones resulta hipnotizante. Gracias a eso, una atmósfera común envuelve a la totalidad del EP y, al mismo tiempo, funciona como el soporte sobre el que la expresividad lírica y vocal de Marshall se desarrolla libremente, asumiendo el protagonismo que le corresponde y mostrando una madurez estética ambiciosa y en pleno crecimiento.- > Por Juan Manuel Pairone


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Discos Viejos






















Roxy Music – Country life

Es casi una constante en estos tiempos refunfuñar por no encontrar una banda o un disco nuevo que nos martille la cabeza, y en parte es la razón por la que se termina cayendo en la escucha de álbumes clásicos.
Country life, además de ser una joya invaluable del rock británico, es considerado junto a The rise and fall of Ziggy Stardust (Bowie) y Electric Warrior (T-Rex), los únicos tres discos indispensables del glam rock, una certeza que no tiene discusión alguna. Hablar de perfección sería demasiado? Bueno, entonces digamos que lo de Roxy Music aquí es notable por donde se lo mire: de su rock sónico se desprenden matices y viajes en todas las direcciones, hechizándonos con la sutileza de los que saben, amparados en un lider (Brian Ferry) arrogante, encantador, dolido, que desnuda sus costados más íntimos con mucha onda, acompañado por un fantástico entorno musical que convierte todo en un hit tarareable (“Three and nine”; “All i want is you”; "The thrill of it all"; “A really good time”). Una maravillosa obra de arte, tan disfrutable que ni dan ganas de dejar de escucharlo. > Por Lucas S. Lapalma























Carneviva - En el límite de la piel

Editado originalmente en cassette, pieza fundamental en la discografía de esta legendaria banda nacida a principios de los ’90 en la ciudad de Santa Fe. En esta segunda producción independiente ya consolidan su personalidad de manera abrumadora, con  “Marito” Alfageme (q.e.p.d.) al bajo, que ya se había unido para la presentación del primer disco en vivo un año antes. Un sonido de viola muy extraño y original (Roland sintetizada en plan Fripp a cargo de Daniel Ferronato) para una banda de base rítmica de pura cepa rockera y blusera; la voz de Gustavo Angelini, llena de matices, líricas delirantes y excesos con certeros elementos que identifican su ciudad natal cual diapositiva, sumados a una precisa batería a cargo de Lucio Venturini; hicieron de este grupo un mito aún viviente. Clásicos inoxidables y pegajosos como “Barrio & roll”, “Todos te quieren”, “Aún no vine” (versionado por varias bandas locales) y el fiestero “El se acostó”, rememoran una época dorada para el rock santafesino que quedará eternamente grabada a fuego en la memoria y los oídos de aquellos que pudimos disfrutar de las grandes performances de este cuarteto.-  > Por José I. Alfageme




jueves, 25 de abril de 2013

Whatever Nro 12: My Playlist - Pablo Mariño*
















:: El himno de mi vida: “Sugar Kane” – Sonic Youth

:: La canción que te hubiera gustado componer: “Dumb dumb dumb” - Teenage Fan Club

:: La última canción que te haya encantado: “Roscoe” - Midlake

:: Un disco infaltable en la discoteca de un fan de tu banda: In utero - Nirvana

:: Una canción que te emocione o te haga llorar: “Sunshine” - Sparklehorse

:: Una banda sobrevalorada de la historia de la música: U2

:: La canción que querés que suene en tu funeral: “Perfect day” - Lou Reed

:: La mejor canción de amor: “Amor en pie” - Daniel Melero

:: Una canción que no puede faltar en la película de tu vida: “Half of person” - The Smiths

:: Una canción para empezar una revolución: “Rockin in free world” - Neil Young

:: El disco que te definió como músico: Arise - Sepultura

:: Tu mejor posesión en (Vinilo/Cassette o CD): Deluxe edition of Weezer, el CD azul, con bonus de temas inéditos.

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* Pablo Mariño es guitarrista y cantante de Esencia, banda que lidera desde el año 2003. Con ellos editó tres discos de forma independiente: Pedaleando melodías; Los que esperan, y su último trabajo llamado Esencia. Fue partícipe con sus bandas Venus Channel, Florecer, y Venuz Pastels, de la primera camada de grupos con orientación hacia el indie rock y el noise en la ciudad de Córdoba, lugar donde reside.

:: Para escuchar Esencia link... acá


lunes, 15 de abril de 2013

Whatever Nro 12: La Burla




















La Burla es una banda atípica por varias razones. Una de ellas se debe a que, como pocas bandas en la actualidad, sus integrantes se conocen desde muy chicos, compartiendo así infancia, adolescencia y cierta adultez en el contexto musical que compone a una banda.

Su nombre como banda se remite, según ellos, al momento en que el punk adolescente impactaba con fuerza en sus vidas. Por esa razón, el curioso y descarado nombre de La Burla, que se mantuvo a lo largo de casi 15 años de carrera musical.
Lo que les contamos se resume en un solo disco, Un trago de agua, donde cada tema representa un momento temporal diferente que resume una emoción particular, pero que posee a la vez una relación con los siguientes temas del disco, logrando así un correlato que engloba el curso recorrido: de la inmensidad del campo al encierro urbano, de la infancia a la búsqueda de un camino y de una identidad que conmueve por sensibilidad terrena y nos lleva a reflexionar con su perfil intimista.
Actualmente se encuentran presentando por todo Buenos Aires un DVD grabado en vivo en el CCC, que incluye viejos y nuevos temas, nuevos rumbos que rememoran la vuelta al campo, pero que es a su vez diferente a sus principios.
Su sonido se caracteriza por varios elementos: la fina voz de Juampi Caiazza, acompañado por punteos preciosistas y a veces ataques veloces de la guitarra de Javi Medialdea (también integrante de Sobrenadar), que sumados a los otros instrumentos llevan a una impronta inusual que vale la pena escuchar.
Próximamente estarán festejando su 13º cumpleaños como banda, celebrando a toda orquesta, con muchos invitados y más sorpresas.
Cabe destacar también su aporte a la movida independiente, ya que son los que gestionaron la creación de uno de los festivales mas interesantes de la actualidad, llamado Plaza Viva, que se hace todos los años en Alem, provincia de Buenos Aires, generando así un movimiento con un propuesta novedosa hacia el arte y una especial participación a todo aquel que se autogestiona.-

> Por Juan Ignacio Videla Espinoza

:: Para escuchar La Burla link... acá.


 

lunes, 8 de abril de 2013

Whatever Nro 12: "Dirty" (Sonic Youth) - 20 años














Dirty, uno de los discos más discutidos de Sonic Youth, cumplió veinte años el año pasado. ¿Pero qué pasaría si alguien lo escucha por primera vez hoy, en 2013? Seguramente se sorprendería de todo lo que puede encontrar ahí adentro, en ese pequeño resumen de la obra de la banda neoyorquina.

Pienso. Es raro escuchar un disco por primera vez cerca de su aniversario número veinte. Sobre todo si, superficialmente, ese disco emana una sensación de actualidad tan notoria que lo ubica fuera de un paradigma fácilmente identificable. Y sobre todo si es un disco de Sonic Youth. La sensación de haberse perdido algo resulta inevitable. Sin embargo, los comentarios, las reseñas y los rumores son casi infinitos, al punto de que uno puede llegar a pensar que “conoce” un álbum solo por haber escuchado un par de canciones o por saber el nombre del productor. Por otro lado, teniendo en cuenta la trayectoria de la banda, es probable que parte importante del espíritu que dio forma al disco haya quedado atrás hace mucho. Con seguridad, la banda de veinte años atrás no representa de manera acabada a la banda de hoy, en su propia actualidad. Pero, pese a eso y -también- precisamente por eso, las ganas de escuchar hasta el último detalle se potencian. Que el pasado se vuelva presente al menos por unos minutos resulta interesante. Un poco tentador también. Y tratándose del cuarteto neoyorquino y de un conjunto de canciones desconocidas, la atención incondicional tiene más importancia todavía. Eso porque Sonic Youth es de aquellas bandas que han logrado un estilo tan inconfundible como ecléctico. Por ende, dentro de la idea que nos podemos hacer sobre Sonic Youth, hay muchos Sonic Youth. Tan distintos como la enorme diferencia que existe entre aquel primer EP homónimo, de 1982, y The Eternal, su último álbum a la fecha, de 2009. El Sonic Youth distorsivo, punk. El Sonic Youth de base monolítica y extensos pasajes melódicos. El Sonic Youth vanguardista en términos de ruido y feedback, en diálogo permanente con el arte contemporáneo. El Sonic Youth de las canciones y -también- de los estribillos. Todas partes de una banda única en su tipo. Una banda que, lógicamente, se fue construyendo a lo largo del tiempo y los discos, con experimentos de todo tipo y, muchas veces, con ideas contrapuestas. Por eso, de alguna manera, no resulta raro escuchar Dirty en retrospectiva, como un eslabón en el medio de esa historia prácticamente inabarcable en términos de volumen. Porque, más allá de ser considerado por muchos como el disco más “comercial” de la banda -al menos en intención y presupuesto-, Dirty tiene un poco de cada una de esas facetas y puede ser visto como un momento bisagra en la carrera (y la identidad) del grupo. De hecho, más allá de lo que implica simbólicamente la producción de Butch Vig (en 1992, justo después de Nevermind y de la mano del mismo sello de Nirvana: Geffen), el álbum no puede ser definido lisa y llanamente como un intento de aggiornar el sonido de la banda a la explosión del grunge. No es, como se dijo y se sigue diciendo, un álbum de Sonic Youth intentando sonar como una banda que escuchó Sonic Youth. Antes que eso, Dirty se posiciona como heredero del sonido de una etapa inmediatamente anterior del grupo -con Daydream Nation (1988) y Goo (1991) como puntas de un iceberg mucho más profundo- y, al mismo tiempo, como precursor de una depuración estética que se acentuaría con Washing Machine (1995) y alcanzaría su máxima expresión en Murray Street (2002), a partir del vínculo con Jim O’Rourke. Eso puede verse en la distancia que hay entre canciones como “Theresa's sound-world” y el cover de la banda hardcore Untouchables, “Nic fit”. Ambas son interpretadas por la misma banda y pertenecen al mismo disco pero su manera de concebir la música -la intensidad, los climas, la razón-de-ser de una canción- es completamente distinta. Algo parecido sucede internamente en “Sugar kane”, “On the strip” y “Chapel hill”. Cada una de ellas tiene partes que funcionan, incluso, por oposición entre si mismas. Momentos de tensión y expansión. Líneas de guitarras luchando y dialogando permanentemente, discutiendo y compartiendo un mismo espacio. Sin embargo, el producto definitivo de esas canciones está marcado por una fluidez tal que logra superar esos momentos superficialmente antitéticos para convertirse en una línea discursiva fuerte, coherente y, al mismo tiempo, atractiva en su riqueza a base de disputas. Una sentencia que, a fin de cuentas, también sirve para resumir las primeras impresiones que deja Dirty. Un disco largo y complejo, denso. Pero un disco que resulta familiar porque sirve para entender el camino trazado por una banda a lo largo de treinta años de búsquedas y (des)encuentros.-


> Por Juan Manuel Pairone


:: Para escuchar Dirty de Sonic Youth completo, link... acá